Parece inverosímil que las sandalias Birkenstock, reinas del moderneo veraniego, tengan sus orígenes en ¡1774! Vale, está claro que la gente del siglo XVIII no calzaba el mismo modelo que el actual, pero la familia que comenzó la leyenda de estas sandalias emblemáticas se dedica a la fabricación de zapatos artesanales desde hace unos 250 años. El primer registro que confirma el año de nacimiento de esta empresa familiar está en un archivo religioso de la ciudad alemana de Langen-Bergheim y en él se habla de Johann Adam Birkenstock como zapatero de la localidad. Ya en 1896 uno de sus descendientes, Konrad Birkenstock, abre dos tiendas de zapatos en Frankfurt especializadas en la elaboración y comercialización de plantillas flexibles.
Debido al éxito de sus productos para el pie, en 1925 la familia Birkenstock inaugura una nueva fábrica en Friedberg, en la que se establecen turnos de día ¡y noche! para satisfacer la enorme demanda de sus cada vez más clientes. Siete años después, Karl Birkenstock empieza a dar cursos para formar a especialistas en ortopedia y cuidado del pie. Más de 5000 aprendices se formaron en estas jornadas en las que, durante una semana intensiva, aprendían el llamado Sistema Karl Birkenstock. Y Karl se vino tan arriba que escribió un libro sobre ortopedia que fue el más vendido de la época sobre el tema. Cuando se lanzó, se publicaron 14.000 ejemplares, o sea un montón. Así que en un principio los zapatos Birkenstock fueron concebidos como calzado ortopédico. ¡Seguro que ahora entiendes por qué son tan cómodos!
El boom de las sandalias Madrid
El punto de inflexión para esta marca alemana de calzado se produce en 1963. Este año la firma decide pasarse a la fabricación de calzado a la moda sin olvidar su esencia de máximo confort para el pie. El resultado: la primera sandalia del mercado con base flexible y hundida en ciertas partes de la planta para facilitar una pisada correcta y saludable. La sandalia Birkenstock Madrid fue en sus tiempos pionera en el calzado cómodo casual y en los últimos años ha vuelto con más fuerza que nunca para convertirse en un must del verano. Una suela ortopédica y dos tiras de piel unidas por una hebilla metálica en la parte delantera del pie. Más sencilla no puede ser. Más cómoda tampoco.
Calzado ecológico casual
El respeto por el medio ambiente no es una novedad para esta empresa de zapatería artesanal. Desde 1988, cuando la palabra sostenibilidad prácticamente no existía, utilizan adhesivos ecológicos en la producción de sus modelos. En ese mismo año Christian Birkenstock, hijo menor de Karl, empieza a trabajar para el negocio familiar y dos años más tarde el primogénito de este, Stephan Birkenstock, entra en la empresa. Los dos hermanos modernizan la fabricación de las plantillas al mismo tiempo que disminuyen el gasto energético del proceso en más de un 90%. En 1991 crean nuevas marcas registradas de varios de sus modelos de suelas y otros productos para el bienestar de los pies que demuestran la excelente calidad de los zapatos Birkenstock.
Pies cómodos en cualquier lugar
A partir de 2014 se amplían las líneas de calzado confortable Birkenstock, enfocadas en diferentes mercados. La marca se centra en cuatro gamas: calzado casual, calzado para trabajar, calzado para estar en casa y calzado más sport. Así, en Miinto podrás encontrar las Birkenstock clásicas, perfectas para un look effortless en la ciudad o para estar de terraceo en tu pueblo de veraneo, y slippers Birkenstock, o sea zapatillas de casa de toda la vida pero con bastante más estilo. Los zuecos Birkenstock son lo más del calzado laboral elegante y las chanclas Birkenstock el must playero que no puede faltar en tus vacaciones en la costa.
Tus sandalias de piel favoritas
Además de las icónicas sandalias Madrid Birkenstock, la casa cuenta con muchos otros modelos, entre los que destacan las sandalias Kumba Birkenstock, que se atan en el tobillo con una fina tira, las sandalias Lugano Birkenstock, con dos tiras más gruesas en diagonal, las sandalias Kyoto Birkenstock, de inspiración japonesa, o las sandalias Arizona Birkenstock, con una tira ancha a la altura del nacimiento de los dedos y otra en el empeine. Aparte de las míticas sandalias Birkenstock color cuero, también descubrirás modelos en blanco, negro, rojo o amarillo. En cuanto a los materiales, las Birkenstock de piel son las más conocidas, pero puedes calzarte unas suaves Birkenstock de ante o innovar con sus sandalias de goma exclusivas, perfectas para la playa o para un outfit veraniego a más no poder.
El regreso de los zuecos
Los zuecos tuvieron su momentazo a principios de los 90, sobre todo entre las chicas, y durante casi dos décadas estuvieron bastante desaparecidos. Marcas como esta han recuperado un calzado super cómodo que vuelve a ser tendencia. Los zuecos Birkenstock son estupendos para lucir un estilo estudiadamente desenfadado en la city, pero también para estar en casa con todo tu estilazo e incluso para trabajar, porque están preparados para estar muchas horas de pie sin que el pie se resienta. Inconfundibles por su característica tira con hebilla el el empeine, son un verdadero lujo para tus pies. ¡Ah! Y ya no son solo las mujeres las que usan este tipo de calzado ahora unisex, ya que cada vez son más los chicos que se animan a usarlo. ¡Los zuecos unisex de Birkenstock no entienden de géneros!
Las sandalias ortopédicas más chic
La fusión entre salud y estética de las sandalias Birkenstock las ha convertido en best sellers del calzado más trendy. El exitazo de sus modelos más famosos llevó a la marca a ampliar su catálogo con la presentación en 2017 de su colección de productos para el descanso Birkenstock. La línea Birkenstock Bed Collection cuenta con camas, colchones y somieres que, como ya te imaginarás, ¡son pura comodidad y diseño! Además, en estos últimos años han empezado a formular cosméticos naturales. Eso sí, sus confortables sandalias siguen siendo su top ventas con diferencia. ¡Por algo será!
